31/01/2013
El portavoz del gobierno surcoreano ha advertido que Corea de Norte tendrá que hacer frente a “
graves consecuencias” si lleva a cabo la prueba nuclear que ha anunciado. Asimismo, le insta a que respete las resoluciones internacionales.
Corea del Sur está estudiando, en colaboración con sus aliados, nuevas medidas punitivas contra Pyongyang que ya ha visto como Naciones Unidas le ha impuesto nuevas sanciones tras el lanzamiento el pasado diciembre de un misil de largo alcance capaz de llevar cabezas nucleares.
Corea del Norte ha contestado asegurando que no renunciará a su programa nuclear y que tiene previsto realizar una prueba atómica nuclear subterránea en breve. Además ha dado por rotas las negociaciones a seis bandas.
Las advertencias del gobierno surcoreano se producen un día después de conseguir por primera vez poner en órbita con éxito un satélite, el Naro-1.
Seúl ha informado del éxito del proyecto, que inició en 2002, y que tiene objetivos civiles. El Naro-1 es un satélite de comunicación destinado a recopilar datos sobre el clima e información sobre las radiaciones atmosféricas.
El todavía presidente en funciones Lee Myung-bak se felicitó por el éxito final del lanzamiento, que se había retrasado por motivos técnicos en dos ocasiones, y ha asegurado que representa el inicio de una nueva etapa para desarrollar la industria espacial.
Corea del Sur entra definitivamente, con esta prueba, en la carrera comercial por el espacio, tras los pasos de otras potencias asiáticas, como Japón, India y la propia China.
Sin embargo el lanzamiento de un satélite, a menos de un mes del exitoso ensayo de Corea del Norte, no deja de añadir más presión a China y Estados Unidos para reactivar el diálogo sobre la desnuclearización de la península coreana.