Redacción
03/12/2012
El sector manufacturero chino ha crecido al ritmo más rápido de los últimos siete meses y confirma que la economía china empieza a superar la desaceleración.
Según los datos oficiales del gobierno chino, el
Índice Gerente de Compras (PMI, siglas en inglés) ha aumentado hasta los 50,6 puntos en noviembre, desde los 50,2 que registró en octubre.
La creación de nuevos negocios y el aumento de las exportaciones han impulsado la producción industrial.
Los subíndices del PMI también indican expansión. El de nuevos pedidos subió un 0,8 por ciento en comparación con el mes de octubre para situarse en el 51,2 por ciento, mientras que el de pedidos para la exportación se situó en el 50,2 por ciento, con un incremento intermensual de 0,9 puntos porcentuales.
Por su parte el banco HSBC ha hecho público su informe mensual en que también constata el aumento de la producción del sector manufacturero, aunque recorta ligeramente el crecimiento y sitúa el PMI de noviembre en los 50,4 puntos.
Aunque el
informe del HSBC suele ser más comedido que el del gobierno chino, no deja de reflejar el mayor nivel de expansión de los últimos 13 meses y el quinto mes consecutivo de crecimiento.
Para los economistas la evolución del PMI es un dato que demuestra que la segunda economía del mundo se está recuperando y deja atrás siete trimestres de desaceleración. Todo parece indicar que el frenazo de la economía ya ha tocado techo y empieza la recuperación.
El PMI es uno de los indicadores más fiables de la evolución de la economía. Se elabora a través de encuestas realizadas a gerentes de compras de cerca de 850 empresas. Un resultado por encima de 50 puntos significa una expansión de la actividad económica y por debajo de 50, que se contrae.
Las previsiones del HSBC contemplan que el crecimiento del PIB se sitúe cerca del 8% en el cuarto trimestre del año, por encima de las previsiones del gobierno chino.