Redacción
09/07/2012
El partido del primer ministro de Timor Oriental, Xanana Gusmao, gana las elecciones legislativas celebradas el 7 de julio, pero necesitará pactar una coalición para gobernar.
Según los resultados provisionales, el Consejo Nacional para la Reconstrucción de Timor Oriental (CNRT), liderado por Xanana Gusmao, es
el partido más votado y obtendría 30, de los 65 escaños que componen el parlamento.
Gusmao necesitará reeditar su coalición con el Partido Demócrata para sumar mayoría y poder gobernar.
El principal partido de la oposición, el Frente de Timor Oriental Independiente (Fretilin), del candidato Mari Alkatiri, ocuparía veinticuatro escaños.
Mientras que el Partido Demócrata, con ocho diputados, se convierte de nuevo en la mejor opción para hacer de partido bisagra y pactar una coalición de gobierno.
Los dos escaños restantes irían a parar al Frente para el Cambio, que obtiene un 3,11% de los votos. Este partido es la nueva formación con la que ha concurrido el actual viceprimer ministro, José Luis Guterres.
Otras diecisiete formaciones han participado en las elecciones legislativas sin obtener los votos suficientes para conseguir representación en el parlamento.
Los resultados definitivos se anunciaran en los próximos días. De momento la Misión Integrada de Naciones Unidas para Timor Oriental (UNMIT) ha asegurado que las elecciones se han celebrado sin incidentes y de forma pacífica.
El pasado abril fue elegido presidente el exguerrillero José María Vasconcelos, conocido como Taur Matan Ruak, en sustitución del premio Nobel de la Paz José Ramos-Horta
La celebración de las dos elecciones sin contratiempos era una condición indispensable para que las fuerzas de la ONU se retiren del país, como está previsto a finales de año.
Las fuerzas de la ONU llegaron a Timor Oriental en 1999 para acompañar el proceso hacia la independencia de esta excolonia portuguesa ocupada por Indonesia desde 1975. En 2002 se proclamo la independencia. Las fuerzas internacionales se retiraron en 2005, pero la inestabilidad y los brotes de violencia hicieron que regresaran en 2006.
Timor Oriental es uno de los países más pobres del mundo, pero tiene importantes yacimientos de gas y petróleo en sus costas que explotan otros países. Precisamente la economía y la gestión de los fondos que reciben por la explotación de sus yacimientos han sido los elementos protagonistas de la campaña electoral.