Redacción
13/02/2012
El Tribunal Supremo de Pakistán ha imputado al primer ministro, Yusuf Raza Gilani, un delito de desacato por negarse a investigar las acusaciones de corrupción contra el presidente Zardari. Gilani puede ser condenado a seis meses de prisión y a dejar su cargo.
El alto tribunal ha desestimado las alegaciones y ha presentado cargos de desacato contra el primer ministro
Gilani que hace unas semanas se declaró inocente y defendió que no se podía investigar al presidente Zardari porque tenía inmunidad presidencial.
La decisión del Supremo representa un pulso contra el ejecutivo de Gilani y el gobernante Partido Popular que también se ha visto muy presionado por el ejército en los últimos meses. Los rumores sobre el riesgo que se produzca un nuevo golpe militar vuelven a desestabilizar la política de Pakistán.
El tribunal considera que Gilani comete desacato al negarse enviar una carta a las autoridades suizas para reabrir un caso de blanqueo de capitales que afecta a algunos políticos y al actual presidente del país, Asif Alí Zardari. El Tribunal Supremo de Pakistán anuló en 2009 la amnistía que el presidente Musharraf decretó en 2007 por casos de corrupción para facilitar el regreso de Benazir Bhutto. Su viudo y actual presidente, Zardari, se benefició de ella al igual que algunos diputados y cargos del actual gobierno.
En su comparecencia del 19 de enero Gilani defendió que Zardari tiene inmunidad presidencial y no se le puede investigar judicialmente.
El próximo 22 de febrero se celebrará la vista y el día 27 la defensa de Gilani presentará las pruebas. Si es declarado culpable puede ser condenado a seis meses de prisión y automáticamente perderá su condición de diputado y por tanto de primer ministro. Sin embargo el proceso será largo ya que en el caso de ser declarado culpable Gilani tendrá derecho a presentar apelación.