Redacción
06/05/2011
Si hace apenas unos años Pekín no figuraba en la lista de inversores en América Latina, hoy la República Popular, con el 9% del total de la Inversión Extranjera Directa, se sitúa en el tercer lugar solamente por detrás de Estados Unidos (17%) y de los Países Bajos (13%).
El 90% de esta inversión china se concentra en la obtención de recursos naturales, fuentes de energía y minerales esenciales para garantizar el alto ritmo de crecimiento de la economía de la República Popular.
En 2010, las empresas chinas han invertido casi 15.000 millones de dólares en los países de América Latina y el Caribe básicamente a través de fusiones y adquisiciones de empresas locales, según refleja el informe de
CEPAL.
Con 56.000 millones de dólares de negocio, China se convirtió en 2010 en el primer socio comercial de Brasil tras superar a Estados Unidos.
Los responsables del informe consideran que el interés de China por la región, donde se prevé un incremento de la inversión del 25% para el conjunto de 2011, no va a decrecer en los próximos años debido a las perspectivas de crecimiento del gigante emergente asiático.
Es más, concluye el documento, a medio plazo, las multinacionales chinas emprenderán un proceso de diversificación que las llevará a invertir también en infraestructuras y el sector manufacturero.