Redacción
12/04/2011
Las autoridades japonesas han elevado la categoría del accidente nuclear en la planta de Fukushima Daiichi del nivel 5 al 7, el máximo en la escala internacional. De esta forma reconocen que los daños ocasionados por el devastador tsunami en la central son igual de importantes que la catástrofe nuclear de 1986 en Chernóbil.
La Agencia de Seguridad Nuclear de Japón ha anunciado que es una calificación preliminar que se basa en datos provisionales. Se ha elevado el nivel de gravedad del accidente atendiendo al impacto de la fuga de radiactividad en vegetales, agua de consumo, aire y en el océano.
Desde Tepco, la empresa que gestiona la central, se ha asegurado que aunque todavía no se ha conseguido detener por completo la fuga de materiales radiactivos, esta remite y en todo caso es sensiblemente menor a la que se produjo en Chernobyl. Fukushima habría emitido aproximadamente un 10% del escape de radiactividad que se produjo en Chernobyl.
Sin embargo, si no se consigue estabilizar la situación en la central nuclear y refrigerar los reactores y las piscinas de combustible a la larga las emisiones de material radiactivo pueden ser iguales o superiores a Chernóbil.
La comunidad internacional ya había elevado el grado del accidente nuclear al nivel 6, el mismo que se asignó al accidente en la planta estadounidense de Three Mile Island en 1979, aunque Japón hasta el lunes 11 de abril, insistía en calificarlo de nivel 5.
El gobierno ha ampliado a 40 kilómetros la zona de evacuación para la población, aunque se realizará de forma escalonada.
Un mes después del terremoto y posterior tsunami que asoló la costa noroeste del archipiélago la tierra sigue temblando. Hoy martes se han producido varias réplicas, una de magnitud 6,4 en la prefectura de Chiba, y otra de 6,3 grados en la prefectura de Fukushima. Ayer lunes un nuevo temblor de 7 grados de intensidad obligó a activar la alerta de tsunami y a desalojar la central.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) calcula que el terremoto se comerá dos décimas del crecimiento de la economía nipona prevista para este año. Las previsiones del FMI rebajan del 1,6% al 1, 4% el crecimiento económico en 2011, pero elevan hasta el 2,1% las estimaciones para 2012. Otras analistas como JP Morgan Chase son menos optimistas y recortan casi un punto el crecimiento estimado para Japón.
Desde el Banco de Japón se ha reconocido el impacto que tendrá en los dos próximos meses la interrupción de suministros y energía.