Malcolm Turnbull se convierte en el nuevo primer ministro australiano 

El ya exprimer ministro Tony Abbott ha perdido una moción interna de su partido por  44 votos frente a los 54 que ha obtenido su sucesor Malcom Turnbull. La vicepresidenta del partido y ministra de exteriores, Julia Bishop, ha sido reelegida en el cargo.

La popularidad de Tony Abbott se había ido desplomando en las encuestas desde hace más de medio año y su liderazgo era cuestionado dentro y fuera del partido. Finalmente Malcolm Turnbull ha forzado una moción de censura que ha ganado.

El nuevo primer ministro, de 60 años, es un experimentado político que dirigió el Partido Liberal en 2008 y 2009, cuando fue derrotado por un solo voto por Tony Abbot.

Se espera que Malcom Turnbull, con un perfil más moderado que Tony Abbott, vuelva a conectar con la opinión pública australiana que parece rechazar las posturas extremistas del exprimer ministro en temas como la oposición frontal al matrimonio homosexual, la política de asilo o la eliminación de las políticas de lucha contra el cambio climático.

A pesar de haber ganado las elecciones en 2013 poniendo fin a siete largos años de gobierno del Partido Laborista, Tony Abbott no ha conseguido cumplir su primer mandato. No ha sido la oposición, si no su propio partido el que lo ha desalojado del cargo en menos de dos años.  

La legislatura no ha sido fácil y Abbot ya tuvo que enfrentarse a otra moción de censura en febrero pasado que consiguió superar.

El primer pulso para comprobar si el cambio es bien recibido por los electores australianos se veré el próximo sábado cuando se celebren unos comicios parciales en el distrito de Canning en la provincia de Australia Occidental.

La inestabilidad parce que se ha establecido como una norma en la política australiana. Cuando no son elecciones generales son las guerras dentro del partido las que hacen cambiar los gobiernos.  

Kevin Rudd y Julia Gillard, ambos del  Partido Laborista, se estuvieron enfrentando y sustituyendo en el cargo de primer ministro varias veces entre 2007 y 2013, periodo en que su partido se mantuvo en el poder.

El último primer ministro australiano que consiguió completar un mandato entero fue el conservador John Howard, que abandonó el cargo en 2007.