La cumbre del G-20 se cierra en Australia con el compromiso de impulsar el crecimiento un 2,1%
El primer ministro Australiano, Tony Abbott, ha clausurado la cumbre del G-20 que se ha celebrado en Brisbane anunciando los planes para impulsar un crecimiento de la economía global de un 2,1%.
Abbott ha detallado que el compromiso de los líderes del G-20 a hacer crecer sus economías al menos un 2,1% hasta 2018 supondrá añadir 2.000 millones de dólares al PIB mundial. Las reformas que se deben poner en marcha deben crear millones de puestos de trabajo para reducir el paro.
También se han adoptado iniciativas para aumentar la participación de las mujeres en el mercado laboral, medidas para luchar contra la evasión fiscal y reformas para eliminar restricciones al comercio mundial.
Se apoyará la inversión en infraestructuras y para ello se creará el Centro Global de Infraestructuras, que tendrá sede en Sídney, con el objetivo de poner en contacto inversores y promotores de grandes proyectos en todo el mundo.
La reunión de presidentes y jefes de gobierno ha finalizado con un documento que recoge más de ochocientas medidas para fortalecer el crecimiento de la economía mundial.
Pero la economía no ha sido la única protagonista, la cumbre de dos días que se ha celebrado en Brisbane ha estado marcada por la crisis de Ucrania y el papel de Rusia.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha recibido fuertes críticas de la mayoría de los participantes y abandonó la reunión antes de que terminara, aunque en sus declaraciones calificó la cumbre de "constructiva".
Aunque Australia, el país anfitrión de la cumbre del G-20, apostaba por centrar la reunión en temas económicos y sacar de la agenda el cambio climático, Estados Unidos y la UE han presionado para que se adopten medidas más enérgicas para luchar contra las emisiones de gases efecto invernadero.
Australia, uno de los países que emite más emisiones de CO2 por habitante del mundo, acaba de derogar una ley que gravaba con un impuesto especial a las empresas más contaminantes.
Los conflictos marítimos en el Mar de China Meridional entre China y sus vecinos asiáticos también ha sido estudiado y se han pedido soluciones para rebajar la tensión.