Nepal da por finalizado la búsqueda de excursionistas supervivientes
Los equipos de rescate de Nepal han dado por finalizada la búsqueda de supervivientes a la fuerte tormenta que se vivió en el Annapurma hace cinco días ya que no creen que pueda quedar excursionistas con vida. Más de 400 personas han sido rescatadas y se han recuperado 39 cadáveres.
Ahora los trabajos de rescate, que lleva a cabo el ejército de Nepal y profesionales, se centrarán en recuperar cadáveres enterrados bajo la nieve y crear una lista de desaparecidos.
Es la mayor catástrofe en la montaña que ha vivido Nepal y entre los muertos se encuentran senderistas de diversas nacionalidades: japoneses, indios, vietnamitas, nepalís, israelitas, canadienses, polacos o eslovacos.
El miércoles 15 de octubre una inusual y fuerte tormenta provocada por el paso del ciclón Hudhud en el norte de la India azotó la cordillera del Himalaya. Los fuertes vientos y la abundancia de nieve que cayó en sólo doce horas bloquearon todos los caminos.
Es la mayor tragedia que ha vivido Nepal en su historia en un accidente relacionado con el montañismo. Nepal es un país acostumbrado al turismo de montaña y escalada que cada año registra accidentes y víctimas mortales en las escaladas a los picos del Himalaya, pero nunca de esta magnitud.
En esta ocasión los excursionistas no realizaban ninguna ascensión de riesgo y no escalaban ninguna de las cumbres del Himalaya, al contrario la mayor parte de las víctimas practicaban senderismo por un itinerario sin riesgo para el que no se necesita ninguna preparación especial: un circuito por el Annapurna de 240 kilómetros que se recorre en unos 21 días y asciende hasta los 5.416 metros de altura en el paso de Thorung. Se calcula que unas veinte mil personas al año realizan esta ruta que está abierta al turismo desde 1977.
Es el peor accidente que Nepal ha registrado en la cordillera del Himalaya desde 1995 en que 26 escaladores – 12 japoneses y 14 sherpas- perdieron la vida en el ascenso al Everest.
2014 se está convirtiendo en un año negro para el montañismo en Nepal. En la pasada primavera dieciséis sherpas perdieron la vida en un alud cuando regresaban a uno de los campamentos base del Everest.