Redacción
14/10/2014
El régimen acalla así los rumores crecientes sobre una hipotética caída en desgracia de Kim Jong-un en beneficio de los militares, como se había especulado durante la prolongada ausencia de la luz pública del tercero de la dinastía comunista de los Kim.
La reaparición en público de Kim no es del todo completa, puesto que la única prueba son fotografías fijas, no existe una versión en video, por lo que no se puede apreciar la movilidad real de que puede disfrutar el líder norcoreano.
Dicho de otra manera, puede que solamente haya posado para el fotógrafo de pie y en realidad difícilmente pueda andar. Tampoco se aprecia hasta qué extremo necesita la ayuda del bastón.
En cualquier caso, las fotos que publica en portada
Rodong Sinmun sí son la prueba de que Kim Jong-un sigue al mando y ponen fin así a las especulaciones sobre la pérdida del poder en beneficio de los militares, en concreto de uno de los que le acompañan en las instantáneas, el general Wang Puong-so.
El hecho de que este militar de la cúpula dirigente hubiera encabezado la delegación norcoreana en el último contacto oficial con Corea del Sur, en plena ausencia del ojo público de Kim Jong-un, le señalaban como el nuevo hombre fuerte del régimen para algunos analistas.
Hoy queda claro que sigue al lado del joven caudillo norcoreano. Nada se sabe todavía de la verdadera dolencia que pueda arrastrar Kim Jong-un, que pese a su juventud podría tener problemas de gota o alguna lesión en los tobillos debido al sobrepeso.