La economía de Japón se contrae en el segundo trimestre y siembra dudas sobre su recuperación

La histórica subida del impuesto sobre el consumo, del 5% al 8%, se ha dejado sentir en el crecimiento económico y puede sembrar dudas sobre si se mantendrá el calendario que prevé que el IVA llegue al 10% en octubre de 2015.

Es posible que el gobierno deba abordar medidas complementarias de estimulo para activar la demanda.

El PIB de Japón se ha contraído en el primer trimestre de su año fiscal, que empieza en abril, un 7,1% interanual, es la mayor caída registrada desde 2009. La cifra supera en tres décimas  las previsiones del gobierno, que contemplaban una bajada del 6,8%. 

En relación al trimestre anterior la economía solo se ha contraído un 1,8%, pero el primer trimestre de 2014 tuvo un comportamiento atípico porque la esperada subida del IVA el 1 de abril provocó que en muchos hogares se avanzaran las compras y por ello se disparó el consumo.

El consumo privado de los hogares japoneses representa un 60% de la actividad económica de Japón y la subida del impuesto sobre el consumo ha reducido el gasto de los consumidores.

La producción industrial también ha caído. El pasado mes de junio bajo un 3,3% respecto al mes anterior, el mayor retroceso de los últimos tres años.

También se ha reducido la inversión en capital de las empresas que ha bajado un 5,1%  entre  abril y junio, más del doble de lo previsto por el Gobierno.

La contracción del PIB presiona al Banco de Japón para que adopte nuevas medidas para estimular la economía con más flexibilización monetaria.

Ante los datos publicados oficialmente por el gobierno japonés surgen las dudas de que la tercera economía mundial pueda cumplir sus previsiones y cerrar su año fiscal 2014 con un crecimiento del PIB del 1%. Algunos analistas ya han avanzado que es muy posible que a pesar del "Abenomics" la economía nipona crezca como mucho un 0.4%.