China anuncia nuevas medidas para relanzar el crecimiento

China teme no poder garantizar un ritmo de expansión de su economía que ahuyente el fantasma de la desestabilización social, principal amenaza para la permanencia del Partido Comunista en el poder.

La situación no es grave en absoluto. Un 7,4% de crecimiento del PIB en el primer trimestre de este 2014 es una magnitud que sería envidiada por cualquier gobierno de país desarrollado o incluso emergente.

Pero la economía china sí da signos de falta de fuelle al ser este dato tres décimas inferior al del último trimestre de 2013.

La nueva estrategia de desarrollo china prevé la creación de un cinturón de comunicaciones a lo largo del río Yangtsé. Esta gran vía de agua ha sido tradicionalmente la única vía eficaz de transporten entre el interior y la costa en China, un país de grandes dimensiones y complicada orografía.

Ahora las autoridades pretenden complementar la funcionalidad del río con infraestructuras que contribuyan también a desarrollar todas las provincias que atraviesa y reequilibrar así, en parte, las diferencias de desarrollo entre la vibrante costa central china y el interior.

La inversión en infraestructuras vuelve a socorrer a las autoridades chinas en la necesidad de garantizar un crecimiento mínimo anual del 7%, el mínimo que Pekín considera imprescindible para generar puestos de trabajo suficientes para la mano de obra entrante en el mercado laboral.

El volumen de mano de obra nueva ha empezado a decrecer, con lo que el gobierno chino pensaba que podía generar suficientes puestos de trabajo con una nueva economía más basada en el consumo interno y menos dependiente de las exportaciones.

Pero la realidad ha modificado esta previsión dado que los ciudadanos chinos no incrementan su consumo en un grado suficiente como para garantizar estos crecimientos del 7%.

Así, el banco central chino también facilitará la circulación del crédito para que los exportadores puedan mantener su actividad y el sector exterior no se debilite, dado que está sujeto también a los vaivenes de la demanda en Estados Unidos y Europa.