Redacción
28/03/2014
El Índice de Precios al Consumo (IPC) en Japón ha crecido en el mes de febrero un 1,3% anualizado. Es el noveno mes consecutivo que suben los precios, pero lo hacen por debajo de las previsiones del gobierno y todavía lejos del objetivo de alcanzar una inflación del 2%.
La
inflación se ha mantenido al mismo nivel que el mes anterior. Los precios se han mantenido estables y sólo han aumentado la luz y los combustibles que se han compensado con la bajada de los servicios.
Sin embargo, el consumo interno se ha desacelerado a pesar que en abril entrará en vigor una histórica subida del IVA, del actual 5% al 8%, que puede ralentizar todavía más el consumo. Los economistas esperaban un efecto llamada para activar las compras antes de la subida de impuestos que no parece que se haya producido.
Desde abril de 2013, el Banco de Japón (BOJ) ha puesto en marcha un agresivo paquete de estímulos monetarios para conseguir salir de la deflación en que Japón vive desde hace 15 años. El objetivo es alcanzar una tasa de inflación del 2% en 2015. La meta se mantiene lejana a pesar del amplio presupuesto invertido en dinamizar la economía.
La buena noticia la ha proporcionado los datos del desempleo, que ha registrado la tasa más baja de los últimos seis años y cae hasta el 3,6%.