Japón y Estados Unidos acusan a Pekín de elevar la tensión con la creación de una zona aérea de identificación
Tanto Tokio como Washington consideran que la creación de una zona aérea de identificación en el Mar de China Oriental por parte del gobierno chino, que incluye las islas en disputa de Senkaku-Diaoyu, solamente puede contribuir a la desestabilización regional.
Redacción
25/11/2013
Pekín, por su parte, no ha tardado en contraatacar citando a los embajadores japonés y norteamericano para expresarles su malestar por las críticas vertidas desde los gobiernos respectivos.
Desde la capital nipona se ha instado a Pekín a revocar la medida que, por otro lado, el gabinete del primer ministro Shinzo Abe asegura de no piensa respetar.
En el mismo sentido se han expresado fuentes militares norteamericanas. Corea del Sur también ha lamentado la medida china.
La nueva zona de identificación anunciada por el gobierno chino implica que los aviones extranjeros que vuelen entre la costa china y una línea imaginaria a unos quinientos quilómetros deberán identificarse ante el ministerio de Defensa chino.
Y, además de identificar-se, cualquier aeronave, militar o civil, que vuele en dicha zona deberá obedecer las órdenes de las autoridades chinas.
De no hacerlo serán objeto de medidas defensivas de emergencia, según la terminología utilizada por Pekín. La entrada en vigor de estas medidas era la madrugada del sábado 25 de noviembre.
El área marcada en los mapas chinos alcanza el grupo de islas cuya soberanía se disputan Tokio y Pekín, las Senkaku, en japonés, o Diaoyu, en chino, y, sobre todo también, el rico yacimiento de gas natural Chunxiao, más al norte.