Redacción
20/11/2013
Yakarta ya había llamado a su embajador en Canberra como medida de protesta por las informaciones sobre el papel de las embajadas y consulados australianos en Asia como centros de captación de información sobre el presidente Yudhoyono y su entorno inmediato.
Son los documentos revelados por el filtrador norteamericano Edward Snowden los que han puesto en jaque las relaciones entre dos países habitualmente comprometidos con la estabilidad del área.
Las revelaciones de Snowden hablan de varios intentos de escuchas sobre los teléfonos de Yudhoyono, del de su mujer y de varios ministros del gobierno de Yakarta.
El presidente Yudhoyono considera que no es posible mantener la cooperación con Australia en materia de inteligencia cuando no se ha aclarado todavía si él mismo u otras instancias gubernamentales indonesias pueden estar todavía siendo espiadas.
Por el momento las relaciones bilaterales se van a mantener en un perfil bajo a la espera, dice Yakarta, de una disculpa por parte del primer ministro australiano, Tony Abbott.
Las relaciones entre Indonesia y Australia, no siempre fáciles en otras épocas, se han intensificado con la estabilización política del archipiélago bajo el mandato del presidente Yudhoyono y en aras del interés mutuo, sobre todo en materia de seguridad antiterrorista.