Redacción
14/08/2013
El jefe de la delegación surcoreana, Kim Ki-woong, y su homólogo norcoreano, Park Chol-su, han firmado un documento de cinco puntos para volver a poner en marcha el polígono industrial, aunque no se ha concretado la fecha.
Según informa la agencia de noticias
Yonhap, el régimen de Pyongyang finalmente ha accedido a comprometerse a no volver a clausurarlo de forma unilateral, bajo ninguna circunstancia.
Las dos Coreas también han acordado “internacionalizar” el parque industrial de Kaesong y abrirlo a la inversión extranjera.
Se ha creado una comisión mixta para supervisar la operación de reapertura, que todavía ni tiene una fecha concreta.
El acuerdo se ha alcanzado tras seis rondas de negociaciones fallidas y después que Corea del Sur advirtiera que esperaba que las negociaciones de hoy fueran las “definitivas”. Además y como medida de presión Seúl empezó ayer martes a abonar las compensaciones a las empresas por la suspensión de la actividad. Era el primer paso para cerrar Kaesong ya que una vez abonado el pago del seguro el gobierno puede ejercer la propiedad de los activos y liquidarlo.
En el parque industrial de Kaesong, situado en territorio norcoreano a unos 20 kilómetros de la frontera, están instaladas 123 empresas surcoreanas que dan empleo a más de 50.000 trabajadores norcoreanos.
Kaesong es una de las principales fuentes de ingresos para el régimen de Pyongyang, que desde su cierre ha pretendido negociar directamente con las empresas y no con el gobierno de Corea del Sur.
Corea del Norte suspendió las actividades en el complejo industrial a principios de abril. La decisión se enmarcó dentro de la escalada de amenazas con las que el régimen de Pyongyang respondió a las duras sanciones adoptadas por la ONU por sus pruebas nucleares.