Redacción
09/01/2013
Acuerdo entre la dirección y los periodistas del semanario Nanfang Zhoumo para finalizar la huelga contra la censura. Los periodistas no serán sancionados por sus protestas y el Jefe de Propaganda Provincial será cesado.
Aunque la libertad de prensa que algunos han reclamado durante los dos días de protesta está lejos, los periodistas del Nanfang Zhoumo parece que han conseguido la promesa de que en el futuro las autoridades de la provincia de Guandong no interfieran de forma directa en la publicación de sus artículos.
Según publica el
South China Morning Post, se habría dado garantías de que el jefe de Propaganda Provincial, Tuo Zhen, será sustituido en un tiempo prudencial. Los huelguistas, la dirección y los censores del partido han optado por rebajar la tensión y evitar que se prolongaran los enfrentamientos.
Los periodistas del semanario Nanfang Zhoumo (Semanario del Sur) se declararon en huelga hace dos días en protesta por la censura de uno de sus artículos de fondo en que se reclamaba al gobierno la garantía de los derechos constitucionales y que fue sustituido por otro que ensalzaba los logros del Partido Comunista de China (PCCh).
El Nanfang Zhoumo se ha destacado por las denuncias de los abusos de la administración. La huelga, una acción inusual en los parámetros de la prensa china, recibió el apoyo de las redes sociales y de centenares de personas que se concentraron a favor de la libertad de información.
Las autoridades han conseguido cerrar rápidamente un conflicto que ha tenido enorme repercusión en la prensa internacional.
En la resolución del conflicto ha tenido un papel relevante el recién nombrado secretario del PCCh en la provincia de Guandong, Hu Chunhua, que está considerado un político ascendente.
A pesar del acuerdo, el Departamento de Propaganda del PCCh ha enviado un comunicado recordando que el gobierno chino tiene el control absoluto de la prensa y sobre lo que se publica en los medios de comunicación y que este principio es inamovible.
También se exige que se publique un editorial del diario oficial 'Global Times', que cargaba con dureza contra la protesta de los periodistas.