Redacción
18/06/2012
India no reduce los tipos de interés y los mantiene en el 8% en contra de las expectativas que auguraban un abaratamiento del precio del dinero para estimular el crecimiento, que se ha situado en el 5,3% en el primer trimestre, el ritmo más lento de los últimos nueve años.
El
Banco de la Reserva India (RBI, siglas en inglés) ha anunciado que no flexibiliza su política monetaria y mantiene los tipos de interés sin cambios. También ha rechazado reducir el ratio de reservas que exige a los bancos para inyectar liquidez en el sistema.
La decisión ha sorprendido a parte de los analistas, que esperaban más medidas para reactivar el crédito y activar la economía. La bolsa ha registrado fuertes caídas tras conocerse la noticia.
El ministro de Finanzas indio, Pranab Mukherjee, considera que los datos de la inflación han influido en la decisión del organismo regulador, del que ha recordado su independencia del gobierno.
Aunque la inflación ha registrado una ligera tendencia a la baja en los últimos meses, sigue estando en niveles muy altos. El IPC de mayo se ha situado en el 7,55% a pesar de los esfuerzos del gobierno por controlar los precios de los alimentos y el combustible.
La presión inflacionista junto con la desaceleración de la economía ha influido en la
decisión del RBI de no apostar por medidas más expansivas.
Según el comunicado del RBI, los tipos de interés no son los responsables de la desaceleración de la economía, como muchas fuentes apuntan, y da prioridad al control de la inflación. La entidad recuerda que los tipos de interés están considerablemente más bajos que en el periodo comprendido entre 2003 al 2007, cuando la economía india crecía aceleradamente.
La única medida de apoyo que ha anunciado el RBI es la ayuda a la exportación al elevar el límite de refinanciación del crédito del 15% al 50%.