Redacción
18/06/2012
Si bien es cierto que los tres tripulantes de la Shenzhou-9 no han intervenido en la maniobra de ensamblaje, programada desde la estación terrestre y ejecutada gracias a los controles de los satélites, es la primera operación de este estilo que lleva a cabo una nave tripulada.
De hecho, esta misión de la Shenzhou-9 tiene como objetivo demostrar que los astronautas chinos --taikonautas—tienen capacidad para realizar una maniobra de este tipo.
En los próximos días se llevará a cabo un desacoplamiento y posterior acoplamiento entre el laboratorio y la nave dirigido por la tripulación.
Precisamente esta tarea es la que dirigirá la primera mujer de la República Popular en participar en una
misión tripulada.
A sus 33 años, Liu Yang será la encargada de dirigir ese momento histórico para el programa espacial chino, que hace escasamente unos años realizaba el primer vuelo espacial tripulado, una simple órbita terrestre a bordo de una cápsula similar a las antiguas Soyuz soviéticas.
De manera muy acelerada, China se está configurando como un nuevo actor en el espacio, con capacidad para rivalizar en los próximos años con los países que le llevan, hoy por hoy, una enorme delantera, los que integran el proyecto de la Estación Espacial Internacional, Estados Unidos, la Unión Europea, Rusia, Japón y Canadá.
Si bien es cierto que hasta la fecha el programa espacial chino no aporta grandes novedades a la industria que el resto del mundo industrializado no conociera ya, la permanente demostración de nuevas capacidades por parte de Pekín no deja de asombrar.
La emergencia de China como potencia en la tierra se proyecta así en el espacio con un programa que se propone establecer una estación permanente espacial antes del fin de la presente década.
Según algunos datos revelados por las autoridades, la estación espacial china pesaría unas 60 toneladas y constaría de un tronco central al que se acoplarían dos naves-laboratorio de menores dimensiones.
Sería una estación considerablemente más pequeña que la Estación Espacial Internacional, pero confirmará, de hacerse realidad en los plazos previstos, la rapidez con la que China ha conseguido desarrollar su propia industria espacial.
En vísperas de ser lanzada al espacio por el cohete Larga Marcha el pasado sábado desde la estación de Jiuquan, en el oeste de la República Popular, Liu Yang afirmaba de China dispone de recursos humanos y técnicos de primera categoría para llevar a cabo exitosamente la misión.