Redacción
03/05/2012
El parlamento de Corea del Sur ha aprobado implementar un sistema de comercio de emisiones de CO2 a partir de 2015 para contribuir a la lucha contra el cambio climático.
Con esta decisión Corea del Sur se suma a las iniciativas políticas de otros países, como recientemente Australia, Nueva Zelanda o la Unión Europea, de establecer un mercado dónde las empresas que menos contaminen puedan vender a otras su cuota de emisión de dióxido de carbono y en conjunto
reducir las emisiones de gases efecto invernadero.
El mercado regula el límite de dióxido de carbono que se puede emitir, incentiva su reducción y penaliza a las empresas que más contaminan.
Al igual que en otros países la iniciativa de legislar para penalizar la emisión de gases de efecto invernadero ha generado un amplio debate en la sociedad. Sin embargo el parlamento ha aprobado la decisión con una amplia mayoría, 148 votos a favor de los 151 escaños que forman la cámara.
La votación muestra el compromiso de los dos principales partidos con la nueva ley y la voluntad de adoptar políticas activas contra el cambio climático, a pesar de los detractores que advierten que las exportaciones surcoreanas perderán competitividad.
La apuesta por desarrollar el sector de las energías alternativas y también de las “tecnologías verdes” para la industria con el objetivo de ser más eficientes y reducir el consumo de energía es una prioridad en un país dependiente de la importación de energía. Actualmente Corea del Sur es el quinto mayor importador de petróleo y el segundo comprador mundial de gas licuado.
En las últimas dos décadas Corea del Sur
ha duplicado la emisión de gases efecto invernadero, de los 300 millones de toneladas de la década de los noventa a los 600 millones de la actualidad.