Redacción
08/05/2012
El gobierno chino ha negado el visado a la corresponsal del canal en inglés de Al-Jazeera en Pekín y obliga a la cadena a cerrar su delegación al no permitir que sea sustituida por otro profesional. Es la primera vez desde 1998 que Pekín fuerza la expulsión de un periodista extranjero.
El hecho se interpreta como un intento de intimidar a la prensa extranjera en un momento sensible, ahora que Pekín se enfrenta a período de transición política con la celebración del próximo Congreso del Partido Comunista Chino.
Además, también se suceden escándalos muy mediáticos relacionados con la lucha por el poder y la corrupción, como el affaire de Bo Xilai, o la persecución de activistas como Chen Guangcheng o Ai Weiwei.
Las autoridades chinas han forzado la expulsión de Melissa Chan, corresponsal del canal en inglés de Al-Jazeera en Pekín desde 2007, al no renovarle el visado. La cadena de televisión, con sede en Catar, asegura que tampoco ha conseguido la autorización para que otro periodista la sustituya.
La Asociación de Periodistas Extranjeros en China (
Foreign Correspondents Club Of China) ha expresado su rechazo a esta decisión y apela al gobierno para que rectifique.
La asociación alerta del aumento de las presiones sobre los periodistas extranjeros y denuncia la utilización de los visados para intimidar y censurar a los corresponsales.
Reclaman que son los medios y no el gobierno chino el que tiene derecho a elegir a los profesionales que trabajen en China. Los periodistas necesitan un visado especial que especifique su profesión y el medio para el que trabajan; sin esta acreditación que otorga el gobierno no pueden residir en China.
Melissa Chan, responsable del servicio en inglés de Al-Jazzera en la capital china, tuvo problemas para renovar su visado y se le otorgó una acreditación de tres meses en vez de la estándar de un año. Al transcurrir el plazo ha tenido que abandonar China.
Las autoridades habían expresado su descontento por un documental emitido por Al-Jazeera en noviembre, pero Melissa Chan no había participado en su elaboración. Sin embargo han acusado a la periodista de violar algunas regulaciones, que no han especificado.