Redacción
23/02/2012
Gloria Macapagal Arroyo se ha declarado no culpable de los cargos de fraude electoral por los que está imputada y detenida desde el pasado noviembre.
La expresidenta de Filipinas ha comparecido por primera vez ante el tribunal de Manila que la juzga.
Arroyo ha sido escoltada desde el hospital militar donde permanece detenida para recibir tratamiento de un problema de columna.
En su comparecencia, ha rechazado haber cometido fraude en las elecciones de 2007 a favor de sus candidatos. Si es declarada culpable puede ser condenada a cadena perpetua.
La fiscalía la acusa de manipular el proceso de elecciones al Senado para conseguir la victoria de sus candidatos en algunas regiones.
Arroyo fue detenida el pasado noviembre para impedir que abandonará el país. La expresidenta intentaba viajar a Singapur, junto a su marido, para recibir tratamiento médico por una rara enfermedad de huesos que padece y supuestamente afecta a su espalda.
Desde entonces permanece retenida en un hospital militar ya que en la legislación filipina los acusados de fraude electoral no tienen derecho a libertad bajo fianza.
Gloria Arroyo fue presidenta de Filipinas entre 2001 y 2010. Durante su gobierno se produjeron numerosos escándalos y rumores de casos de corrupción y fraude electoral, pero gracias al control que ejercía sobre la judicatura con nombramientos de jueces afines parecía que evitaría los procesos judiciales.
El actual presidente Benigno Aquino III asumió el poder en junio de 2010 tras ganar las elecciones con promesas de luchar contra la endémica corrupción de la política filipina.