Redaccion
18/11/2011
La expresidenta de Filipinas, Gloria Macapagal Arroyo, ha sido detenida en el hospital de Manila donde estaba ingresada. Se le imputa un delito de fraude electoral cometido en las elecciones de 2007.
Arroyo ha quedado bajo custodia policial en la clínica en la que está hospitalizada recuperándose de una operación de columna vertebral y de problemas relacionados con las glándulas tiroides.
La detención se ha producido después que el Tribunal Supremo rechazará una moción del gobierno para impedir que se prohibiera a la expresidenta Gloria M. Arroyo abandonar el país.
El entorno de Arroyo asegura que es inocente y las acusaciones falsas, además denuncian la campaña de acoso del actual gobierno.
La expresidenta Arroyo ha intentado librar una batalla legal para que se le permitiera viajar al extranjero para recibir tratamiento médico ya que asegura que sufre una rara enfermedad en los huesos. De hecho hoy viernes tenía previsto volar a Singapur, junto a su marido, para oficialmente ser ingresada en un centro médico.
Sin embargo, el hecho de que los destinos elegidos no tengan tratado de extradición con Filipinas había levantado las alertas del gobierno.
La orden de detención ha sido emitida por un tribunal de la capital y cursada de forma inminente ya que los acusados de fraude electoral no tienen derecho a libertad bajo fianza.
La detención obedece a una denuncia presentada por la comisión electoral en que acusa formalmente a Arroyo de fraude electoral en los comicios legislativos celebrados en 2007. El delito puede acarrear una pena de hasta 40 años de prisión.
Durante meses han persistido los rumores sobre las posibles acusaciones contra Arroyo por malversación de fondos y fraude electoral. Ante las especulaciones el gobierno intentó bloquear legalmente una posible salida al extranjero de la expresidenta, el Tribunal Supremo, controlado por jueces nombrados por Arroyo, había rechazado esta posibilidad en dos ocasiones anteponiendo el derecho de presunción de inocencia.
Gloria Macapagal Arroyo fue presidenta de Filipinas entre 2001 y 2010. Pertenece a una importante saga política y es hija de un anterior presidente, Diosdado Macapagal.
En junio de 2010 fue sustituida por Benigno Aquino que llegó a la presidencia con la promesa de investigar la corrupción en la administración durante el mandato de Arroyo.