China realiza con éxito su primer acoplamiento espacial
El programa espacial chino supera con éxito otro paso crucial para el desarrollo de una estación espacial propia a finales de la década con el acoplamiento del cohete Shenzhou-8 al módulo espacial Tiangong-1.
Redacción
03/11/2011
Con el simbolismo añadido de que la operación se realiza a 340 kilómetros de altitud en la perpendicular del territorio chino, la maniobra supone el primer escalón de un proceso que llevará a la República Popular a competir también en el espacio con las potencias tradicionales, Estados Unidos, Europa y Rusia.
En este primer acoplamiento espacial chino ni el cohete Shenzhou llevaba tripulación ni la había en el módulo espacial, por lo que todo el operativo estaba automatizado y controlado desde el control terrestre.
Pero los responsables del programa espacial chino anuncian que el próximo experimento ya se hará con un cohete tripulado, previsiblemente en 2012.
La aventura empezó en septiembre, cuando el Tiangong fue puesto en órbita por un cohete Larga Marcha 2F. El Shenzhou-8, lanzado esta misma semana, permanecerá doce días asociado al Tiangong para ejecutar entonces una segunda prueba de acoplamiento.
Finalmente, la nave Shenzhou regresará a la tierra el 17 de noviembre.
Entonces será el momento de analizar los resultados de experimentos en ingravidez efectuados en este operativo sobre la base de la colaboración con la Agencia Espacial Alemana.
Los científicos germanos han enviado al espacio un equipo experimental destinado a comprobar el comportamiento en el espacio, lejos de la gravedad terrestre, de células de vegetales y animales, con la vista puesta en eventuales aplicaciones médicas, en particular en el tratamiento del cáncer.
Con esta colaboración se demuestra la aparición de un nuevo agente en la carrera espacial, no cerrado a cooperar con el resto de la comunidad internacional, una potencia emergente con mucho dinero fresco, con los pies bien anclados en tierra, pero con la vista puesta en el cielo, que en la China actual, parece ser el único límite.