Redacción
30/08/2010
El gobierno japonés ha anunciado que utilizará
920.000 millones de yenes (10.865 millones de dólares) del presupuesto de este año fiscal para impulsar nuevas medidas de estímulo económico a finales de setiembre. El gobierno quiere mover ficha de forma rápida y flexible aunque sea con mayores aportaciones presupuestarias.
Estaba previsto que el primer ministro
Naoto Kan desvelara los detalles sobre las decisiones del ejecutivo para hacer frente a la apreciación del yen a principios de esta semana, aunque finalmente se ofrecerán el 10 de septiembre.
Con todo, este anuncio del ejecutivo llega horas después de una reunión de emergencia mantenida por el Banco Central de Japón (BOJ) para intentar frenar la subida del yen.
Entre las medidas de estímulo fiscal presentadas para estabilizar la moneda, el BOJ mantendrá los tipos de interés en el 0,1% y ampliará seis meses más los incentivos para conceder préstamos a bajo interés con un presupuesto adicional de 10 billones de yenes (117.000 millones de dólares).
Estas reuniones y decisiones de urgencia responden a la fuerte
apreciación del yen frente al dólar y al euro en este mes de agosto. En relación al dólar, el yen se ha situado en su nivel más alto en 15 años, y respecto al euro en casi una década.
Las nuevas medidas buscan impulsar el consumo y la creación de empleo. El gobierno también quiere facilitar la entrada al mercado laboral de los recién diplomados e impulsar la inversión de las empresas en temas relacionados con el medioambiente.
La fortaleza del yen puede penalizar seriamente las exportaciones niponas y lastrar la ya frágil recuperación de esta economía, que habría perdido el puesto de segunda potencia económica mundial en el primer semestre del año a favor de China.
Además, según un informe del gobierno, varias industrias estarían tomando en consideración la posibilidad de trasladar su producción a otro país si la moneda sigue ganando valor.